¿”Positivismo” a toda costa o coherencia emocional?


Si bien no deja de ser cierto que ser “positivos” (a modo de entrenamiento mental) tiene sus ventajas y nos predispone a inspirarnos con imágenes creando pensamientos constructivos y de una más alta vibración en contra de esas mentes negativas y “tóxicas” que siempre ven lo peor en cada situación, sería bueno tener en cuenta que hasta esa carencia y “negativismo” uno no se la inventa y muchas veces conecta con algo anteriormente ocurrido (tanto de la persona en cuestión como de su sistema familiar) por eso buscar en esa referencia, cuándo se originó esa “mala tendencia” es lo que finalmente nos puede liberar de la misma en cuanto a ese estado limitante igual que en tantos otros estados distintos de diferente connotación. Todo lo que sigue vivo pero “dormido” en nuestra memoria inconsciente necesita ser sanado y liberado, por eso, tomarse la vida como ese “movimiento Happy” que está tan de moda no considero que sea lo más adecuado en base a esta ola de positivismo exacerbado que se va extendiendo hoy, ese positivismo de “todo está bien”, “se feliz”, “viva la vida”, “yo puedo con todo”…. y mil “tips” más en esa línea que nos ponen en actitud de negar nuestra evidencia emocional, normalizando situaciones constantemente que nos van alejando de nuestra realidad hasta perder la conexión con nosotros mismos y con nuestras verdaderas dificultades, negándonos de este modo la posibilidad de trascenderlas y avanzar de una forma real y consistente según nuestra guía emocional. Lograr ubicarnos emocionalmente y ser coherentes a lo que verdaderamente sentimos es lo único que nos permite salir desde ese punto, aprendiendo a gestionar nuestros estados emocionales para lograr adquirir los recursos necesarios que serán los que, poco a poco y con nuestro trabajo personal, nos irán situando en un camino real (positivamente hablando) que no es más que la conexión con nosotros mismos en cada momento, para “bien” o para “mal”, conceptos que no tienen cabida en el mundo emocional pues todo lo que uno siente se debe afrontar y tomar como bueno pues hace parte del proceso de cada individuo, no puede haber nada que supere a esto pues sólo siendo dueño de uno mismo se está al frente de la propia vida y se la puede impulsar hacia donde nos dicte el corazón, sin esa conexión real todo carece de sentido pues se vive desde una “matrix”, que es la película que nos montamos y así ocurre que, muchas veces, creemos estar “en el cielo” y de repente (con cualquier detalle nimio) nos estrellamos, probablemente porque ese estado alcanzado no era real.

Ahí lo dejo…para reflexionar.

“Positivismo” versus gestión emocional.

 


Myriam Segrelles
coach & creative

Coach Integrativa y Sistémica
Especialista en gestión / desbloqueo emocional
y empoderamiento personal

DESARROLLO PERSONAL/PROFESIONAL